Entrevista a José Rigane
En diálogo con ACTA, José Rigane, secretario general adjunto de la CTA y secretario general recientemente relecto de Luz y Fuerza de Mar del Plata habló de la elección, del proyecto político gremial del sindicato que dirige y de las políticas energéticas de la Argentina: “este Gobierno se dice defensor de la soberanía de Las Malvinas pero permite que la British Petroleum tenga la concesión a 40 años del Golfo San Jorge que es una de las cuencas más grandes de la Argentina donde se obtiene el 25% del oro negro”.
¿Qué características tuvo la elección en Luz y Fuerza de Mar del Plata?
La elección fue muy dura porque no solamente tuvo un carácter confrontativo entre dos listas sino que además hubo una intervención del Ministerio de Trabajo que puso inspectores para observar todo el proceso electoral y también hubo una intervención por parte de Yasky y sus abogados. Nuestra lista 1 confrontó con la lista Bordó número 8.
La elección fue transparente, no hubo ninguna impugnación, votó prácticamente el 90% del padrón y hubo una presencia muy importante de todo el sector de jubilados y aunque el resultado fue muy disputado – nosotroso ganamos por 32 votos- pero que tienen un valor importante porque nos permitieron una vez más ratificar el mandato que venimos desarrollando desde principios de 1987.
¿Qué es lo que estaba en juego?
Fue un proceso electoral que no tuvo desde la oposición un proyecto político gremial a confrontar; en realidad tuvimos que confrontar con difamaciones, con mentiras, con volanteadas en las casas de los compañeros pero no con un proyecto político gremial diferente y además también la lista opositora se cuidó de expresar opiniones que de haberlas hecho públicas hubiese tenido rechazo del conjunto de compañeros de Luz y Fuerzas de Mar del Plata. Nunca defendieron la CTA ni la Federación, ellos más que nada se inclinaban a una propuesta de carácter meramente social y a una iniciativa que tenía más que ver con el turismo y la farmacia pero no tanto con la defensa de los derechos de los trabajadores.
¿Y cuál fue el proyecto de ustedes?
Nosotros llevamos una propuesta de 20 páginas en la que desarrollamos toda la iniciativa que tiene que ver con la CTA, con la Federación de Trabajadores de la Energía, también con toda la propuesta de la integración regional, la soberanía, la democracia participativa junto con lo que entendemos como la recuperación del patrimonio nacional energético, el desarrollo de las iniciativas para establecer la energía como un bien social, como un derecho humano y al mismo tiempo, por supuesto, profundizar las políticas que venimos desarrollando desde lo social con las becas, la entrega de útiles escolares, guardapolvos, los ajuares para los recién nacidos, una mayor cobertura de la obra social, el fondo solidario propio.
Por todas estas cosas los siguen eligiendo
Tenemos una rica historia en Luz y Fuerza de Mar del Plata y entendemos que si bien fue una elección disputada desde el punto de vista de los votos, también en los compañeros ha habido cierta confusión respecto de la existencia de tanta difamación y tanta mentira sin información.
¿Ustedes apuntan a la juventud?
En la nueva lista, de 32 miembros, hay 11 compañeros que son jóvenes y que ingresan por primera vez a la conducción. Nuestro promedio de edad es de 48 años.
La última pregunta tiene que ver con YPF: qué es lo que está pasando en este momento porque luego del boom en los Medios la información es muy escasa
Estamos ante una recuperación, una expropiación pero no una nacionalización porque es una iniciativa que si bien la saludamos quedó a mitad de camino porque lo cierto es que todo el patrimonio energético está en manos extranjeras. Habría que seguir profundizando para apropiarnos de ese patrimonio para que tengamos una alternativa absolutamente diferente a la existente hoy. Por un lado, YPF no es una empresa del Estado y por lo tanto no se puede calificar como una nacionalización.
El tema está estancado porque el gobierno no se alejó de la línea de buscar capitales extranjeros para que inviertan en el país. Nosotros creemos que lo que hay que crear es una empresa del Estado, 100% nacional, en la que debe tener participación el Estado nacional no este Estado bobo que es socio de los grupos multinacionales y donde debe haber participación de los trabajadores y de las organizaciones que defienden el medio ambiente como una forma de socialización de esa empresa con alto contenido nacional y soberano.
Antes de ayer, la Presidenta cuando estuvo en Bolivia, se comparó con Evo Morales por las “nacionalizaciones”, pero hay muchas diferencias, ¿no es cierto?
Sí, nada que ver: Argentina no tiene ninguna política de nacionalización ni de recuperación del patrimonio nacional ni de nuestra soberanía nacional y la prueba más contundente es que se dice defensor de la soberanía de Las Malvinas pero permite que la British Petroleum tenga la concesión a 40 años del Golfo San Jorge que es una de las cuencas más grandes de la Argentina donde se obtiene el 25% del oro negro. No tiene nada que ver con los procesos de Bolivia, Ecuador, Brasil, mucho menos de Cuba ni de Nicaragua.
Es sólo discursivo
Sí, en ese sentido, Argentina no tiene ninguna modificación de las políticas que se implementaron no sólo en la década del ’90 sino hace 40 años: ha ido profundizándose el modelo energético privatista y extranjerizante.