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Héctor Quagliaro: El legado de un dirigente emblemático de ATE
El emblemático dirigente de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Héctor Quagliaro, y la vigencia de sus ideas sigue impulsando la lucha del sindicato. Dedicó 50 años de su vida a la defensa de los derechos de las y los trabajadores. Hoy, a 15 años de su fallecimiento, se reivindica su lucha y convicción por un país justo, soberano y democrático.
Los orígenes de Héctor Quagliaro
Héctor Quagliaro nació en la ciudad de Rosario (Santa Fe) en 1933. Cursó sus estudios en la Escuela Nº565 y tuvo su primera experiencia laboral a los 12 años, cuando se desempeñó como ayudante de lechero. Desde entonces comenzó a forjar una sensibilidad singular que implicó mayor conciencia de clase y un fuerte compromiso social y político.
El inicio de su militancia en el ámbito laboral
A los 20 años ingresó a los talleres del Ministerio de Obras Públicas de la Nación, siendo ésta la piedra fundacional de su extensa militancia por los derechos laborales. Junto a sus compañeros, lograron organizarse para luchar contra la explotación y los abusos en el ámbito laboral.
A los 26 años fue elegido Secretario General de la Seccional Rosario de ATE, enfrentando momentos de intensa actividad sindical.
Héctor Quagliaro y su impacto en el movimiento sindical
Quagliaro integró las 62 Organizaciones, desde donde surgieron los documentos preliminares de La Falda (1957) y de Huerta Grande (1962), antecedentes históricos del Programa de Huerta Grande impulsado por la CGT de los Argentinos a finales de 1960.
Fue un opositor clave a la dictadura de Juan Carlos Onganía y desempeñó un rol fundamental en el Rosariazo de 1969.
Resistencia durante la dictadura cívico-militar
Uno de los períodos más significativos de su vida ocurrió en 1976, cuando la dictadura cívico-militar lo cesanteó de su trabajo y lo expulsó de la conducción de ATE, junto a otros dirigentes. Sin embargo, la represión no detuvo su lucha: junto a otros militantes, fundó la Agrupación Nacional de Unidad y Solidaridad de ATE (ANUSATE).
Esta agrupación permitió años más tarde recuperar la conducción del sindicato mediante el voto democrático de las y los afiliados. Entre sus compañeros más destacados estuvieron Germán Abdala y Víctor De Gennaro, quienes junto a Quagliaro marcaron un hito para ATE.
La vuelta a la democracia y su liderazgo sindical
Con el regreso de la democracia, en 1985 Quagliaro se reincorporó a su puesto de trabajo y, dos años más tarde, fue elegido Secretario General de ATE Santa Fe, cargo que ocupó hasta 1999. Luego, condujo nuevamente el secretariado rosarino hasta el 2003.
En 2003 asumió la presidencia del Centro Nacional de Trabajadores Jubilados y Pensionados de ATE Nacional y de la Federación de Jubilados de la CTA, cargos que ocupó hasta su fallecimiento el 25 de enero de 2010.
Palabras y convicciones de Héctor Quagliaro
“Tenemos un privilegio que no tienen muchos y es que seguimos siendo los mismos compañeros que peleamos desde nuestros sectores de trabajo, que no claudicamos, que no nos entregamos, que no fuimos la pata sindical de ningún gobierno porque tenemos valores morales, que son lo que la gente quiere”, pronunció Héctor Quagliaro en el homenaje a los 20 años de la recuperación del sindicato.
En este evento, evocó lo que fue uno de los hechos más significativos para la Asociación Trabajadores del Estado desde su fundación.
El legado de un dirigente histórico
A 15 años del fallecimiento de Héctor Quagliaro, simbólico dirigente del sindicato de las y los trabajadores estatales, honramos su legado nutrido de 50 años de militancia que promovió un modelo de país más justo, soberano y democrático.
