Los trabajadores de ATE se manifestaron en situación de alerta ante la inminente privatización del Centro Hípico local que es administrado por el gobierno bonaerense. Los agentes públicos reclaman continuar su estabilidad laboral bajo la administración provincial.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires tiene listos los pliegos para llamar a licitación nacional e internacional del Hipódromo platense. Frente a esta situación, los afiliados de ATE rechazan la concesión estipulada por 30 años que le dejaría a la empresa beneficiada un subsidio de 12 millones de pesos mensuales (que actualmente se destina el 60 por ciento para los premios y el 40 por ciento restante para rentas generales).
Además, denuncian la contradicción de la gestión de Daniel Scioli, quien decide pasar a manos privadas parte del juego mientras se están estatizando los servicios de limpieza. Por eso advierten que “el juego debe estar bajo la órbita del Estado”.
Es preciso recordar que el Hipódromo fue privatizado en dos oportunidades, ambas durante dictaduras (en 1978 y 1983 –meses antes del advenimiento de la democracia-). Mientras que fue reabsorbido por la administración pública en 1997, momento en el cual se hizo cargo de un pasivo de 16 millones de dólares.