La Central de Trabajadores de la Argentina, junto con las labores propias de la unidad de acción para frenar el ajuste y el consiguiente pliego reivindicatorio de los trabajadores aún desoído por el Gobierno, ha puesto sobre el tapete el debate acerca de la necesidad de articular nacionalmente la lucha en defensa de nuestros bienes naturales.
En esa dirección, durante la última reunión del 2012 de la Conducción Nacional de la CTA realizada en la ciudad de Mar del Plata los días 29 y 30 de noviembre, se decidió, entre otros puntos, impulsar una Consulta Popular en defensa de la Soberanía sobre nuestros Bienes Comunes.
Esta iniciativa política implica la convocatoria al más amplio espectro de organizaciones sociales, medioambientales, estudiantiles, sindicales, políticas, territoriales, de pueblos originarios y culturales para afrontar el desafío de plantar un mojón de democracia participativa en un tema tan sensible y caro a nuestro pueblo como es la defensa del agua, la tierra, los hidrocarburos, los bosques, el aire que respiramos envenenado por los procesos de megaminería a cielo abierto, el fracking, los agrotóxicos, la deforestación, la soja transgénica, etcétera.
La propuesta de que se le consulte al pueblo sobre este conjunto de temas que hacen al futuro de nuestra sociedad, demandará durante el 2013 una acción planificada orientada a la difusión, organización y recolección de firmas para concretar una Consulta Popular en Defensa de nuestros Bienes Comunes que hoy son saqueados por las multinacionales con el visto bueno del Gobierno.
Así como en la etapa de defensiva estratégica desde la CTA y junto a otras organizaciones populares supimos construir y llevar adelante la propuesta de shock redistributivo con el Frente Nacional Contra la Pobreza (FRENAPO), en esta etapa de avance popular, es menester avanzar en una iniciativa que ponga en la agenda de debate un tema que es sistemáticamente ignorado tanto por la prensa hegemónica como por la adicta al Gobierno.
Y hay que hacerlo antes de perder la Cordillera de Los Andes, entregar el agua que está en el interior de nuestros cerros, destruir toda forma de agricultura familiar y dejar tierra arrasada.
Acaba de decir Evo Morales en su Manifiesto de la Isla del Sol a propósito de la Soberanía sobre los Recursos Naturales que es “la condición para la liberación de la dominación colonial y neoliberal y para el desarrollo integral de los pueblos”.
El documento indica que “en la mayoría de los países esta riqueza ha sido saqueada y apropiada por manos privadas y potencias transnacionales que se enriquecen a costa de los pueblos”.
El proceso de convocar a una Consulta Popular en defensa de la Soberanía sobre nuestros Bienes Comunes, apunta a interpelar este modelo productivo agroexportador, sojero y extractivista que hipoteca nuestro porvenir como pueblo y como Nación.