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Los empleados de maestranza amenazan con realizar un paro total si no les pagan el salario. El reclamo también se extendió al personal de cocina. Los servicios ya están reducidos y en las habitaciones se empezó a notar la falta de higiene. “Nos está afectando bastante”, admitió el director del nosocomio, Claudio Ricasoli.
A raíz del conflicto, los pacientes están recibiendo la mitad de la ración habitual.
La situación en el Hospital Interzonal “Abraham Piñeyro” ya es preocupante y podría empeorar, si es que los empleados a cargo de la limpieza y la cocina no reciben el pago del sueldo correspondiente al mes de julio.
La semana pasada, los operarios de ambas áreas decidieron reducir sus actividades (modalidad conocida como quite de colaboración) al no percibir sus haberes salariales, excluyendo de esa medida a las habitaciones con pacientes en estado crítico y a los quirófanos. La situación generó que hoy por hoy sólo sean operados los pacientes que necesitan una intervención urgente o que concurran al centro asistencial el mismo día en que les fue programado el tratamiento quirúrgico (ver recuadro).
A raíz de este conflicto, la falta de higiene ya se hace notar en las salas y pasillos de la institución. Al mismo tiempo, la ración de comida que se les brinda a los hospitalizados se redujo un cincuenta por ciento.
Semejante panorama está bastando para encender la preocupación de internados, allegados, médicos y enfermeros, dado que la resolución del tema depende del Ministerio de Salud bonaerense y, hasta ayer, desde la cartera sanitaria no brindaban ninguna certeza sobre cuándo saldarían la deuda con los cuarenta obreros que están llevando adelante la protesta.
“Esto nos está afectando bastante”, reconoció a DEMOCRACIA el director del nosocomio, Claudio Ricasoli, quien se expresó contrariado y casi sin respuestas al ser consultado sobre lo que puede suceder si la Provincia no cancela el compromiso monetario que tiene con la empresa tercerizada de los servicios de limpieza y cocina. “Estamos tratando de reemplazar parte de las tareas de higiene con gente del hospital, pero lo que podemos hacer es muy limitado porque no tenemos personal específico abocado a esas tareas”, indicó.
Ricasoli señaló que “por el momento” no se suspendieron las operaciones, pero sí se limitó el cronograma y sólo se concretan aquellas que no pueden esperar. “No podemos tener a una persona internada un par de días antes de la operación sin saber si al momento de que ésta tenga que concretarse van a estar dadas las condiciones de asepsia necesarias”, explicó, en un testimonio que grafica a las claras la incertidumbre que se vive en la entidad sanitaria.
Por otro lado, Ricasoli dijo que se encuentra en contacto permanente con autoridades del Ministerio para pedirles que subsanen de una vez la deuda, aunque admitió que no hay garantías sobre la fecha en que llegará ese salvataje. “Me dijeron que mañana (por hoy) estarían abonando algo de lo que le deben a la cooperativa”, comentó.
El reclamo de los trabajadores
Por su parte, Claudia Patrón, representante de los trabajadores de la cooperativa de limpieza del hospital, explicó los motivos que llevaron a los 28 trabajadores del sector de maestranza y a sus colegas de cocina a restringir las tareas desde hace diez días. “Iniciamos un quite de colaboración porque hace siete meses que el Ministerio de Salud no le paga el canon a la cooperativa de limpieza y se está complicando para pagar los sueldos del personal”, le dijo la vocera de los operarios a DEMOCRACIA.
Patrón señaló que hasta el lunes 6 de agosto “nosotros seguíamos limpiando para mantener un orden mínimo del hospital, pero como vimos que no nos daban respuesta, el martes 7 decidimos no hacer nada más”.
Este es el primer mes que los cuarenta obreros -contando a los cocineros- no perciben sus ingresos, más allá de que, por ejemplo, a la cooperativa que tiene concesionada la limpieza la Provincia le debe más de tres millones de pesos.
“Pese a esa deuda del Ministerio, a nosotros la cooperativa nos venía cumpliendo. El 3 ó 4 de cada mes estábamos acostumbrados a cobrar, pero fijáte la fecha que es hoy [por ayer] y todavía no nos han pagado”, se quejó Patrón.
La mujer dijo que durante el curso de esta semana van a persistir con el plan de atender las zonas críticas del hospital, pero también advirtió que si para el sábado no tienen el dinero en la mano, la medida se va a tornar drástica al máximo. Esto es, el hospital, que ya luce sucio y descuidado en numerosos rincones de su estructura, se quedará sin limpieza y sin cocina por completo.
Fuente: Diario Democracia
